Dicen que quien no arriesga no gana y eso lo puso a prueba cuando decidió apostar por su mayor sueño, el que tanto deseaba. Con la esperanza de convertirse en actor de Hollywood, comenzó a trabajar como lavaplatos en la tierra de las oportunidades. Lo que no imaginaba es que años después la vida lo sorprendería.
"Después de conseguir el dinero necesario, viajé a visitar la ciudad de mis sueños: Los Ángeles, Estados Unidos. Fueron 10 días increíbles, al punto que me enamoré perdidamente de la ciudad y decidí quedarme permanentemente. Algo muy difícil, pero no imposible", dice Guillermo Zapata en entrevista con Clarín.
El hombre de 55 años -originario de la provincia de Buenos Aires- tomó la decisión de emigrar a Estados Unidos en 1992, con el objetivo de experimentar una nueva vida en la ciudad de las estrellas y continuar su carrera artística.
La historia de una pasión.
La protagonista de esta historia nació en la ciudad de Bella Vista, al noroeste del Gran Buenos Aires. Desde que tiene memoria, ha disfrutado de una vida rodeado de artistas. Con tan solo 4 años realizó giras y cantó en diversos escenarios junto a su padre, Rodolfo Zapata, famoso cantante y actor argentino.
Por ello, su vocación artística nació desde muy temprana edad. Durante toda su adolescencia siguió los pasos de su padre y se dedicó a la música. Sin embargo, su verdadera pasión era la actuación, razón por la cual, al terminar la secundaria, fue aceptado en el Conservatorio Nacional de Arte Dramático.
Allí adquirió las herramientas necesarias para actuar como actor profesional. Luego de tres años, fue contratado para interpretar un personaje de la reconocida serie argentina "Clave del Sol". Un año después participó en la telenovela "Rebelde", junto a Ricardo Darín.
"Fue un gran desafío, pero creí en mí mismo y en mis habilidades. Esto me permitió adaptarme y aprender mucho", explica el empresario. De esta manera logró ahorrar dinero y conseguir un boleto de avión para visitar el destino de sus sueños: Los Ángeles, en Estados Unidos. Así, en 1992, a la edad de 22 años, se despidió de su familia y viajó a un país desconocido con una visa de turista.
"Al llegar quedé fascinado por la ciudad, la gente y el clima. Fue entonces cuando comencé a fantasear en voz alta y considerar la posibilidad de vivir el sueño americano, pero no conocía a nadie y no hablaba el idioma nativo. Lo que quería parecía casi imposible, pero me arriesgué y lo logré", explica emocionado Guillermo.
Debido a esto, -en su último día de vacaciones- fue a tomar un café a un bar ubicado en Melrose Avenue. Allí notó que muchos de los camareros eran actores o aspirantes a actores en formación, algo muy común en Los Ángeles, dijo.
"Le pregunté al camarero: '¿Cómo puedo conseguir trabajo aquí?', a lo que me respondió que si no sabía hablar inglés, lo primero que debía hacer era trabajar como lavaplatos. Luego me presentó al dueño de la empresa y conseguí trabajo ese mismo día. Y ocho años después regresé a la Argentina por primera vez", dice el actor argentino.
Con la esperanza de llegar a la meca del cine de Hollywood al día siguiente, se matriculó en una escuela pública de inglés y aprendió el idioma a la perfección. Pasaron los meses y Guillermo comenzó a crecer en el ámbito gastronómico, lo que le permitió conseguir dos trabajos como mesero, en diferentes restaurantes.
Así logró una mayor estabilidad económica y en 1996 obtuvo la residencia permanente. Este documento le permite vivir y trabajar permanentemente en cualquier estado de los Estados Unidos.
Al mismo tiempo, representó una puerta de entrada a la actuación estadounidense, pues tuvo la oportunidad de contratar un agente y pertenecer al sindicato de actores de cine, mejor conocido como "SAG-AFTRA".
El inicio de "Sur Restaurante & Lounge"
Con el paso del tiempo, Guillermo ascendió de rango y, en 1998, asumió el puesto de gerente de un restaurante de West Hollywood. "Ese año, una familia argentina se acercó a mí por mis conocimientos en el área y me ofreció una oferta laboral: ser dueño de su negocio gastronómico que estaba por cerrar", dice el argentino.
"Para asociarme con ellos me ofrecieron el 40% del restaurante, propuesta que implicaba un riesgo muy grande. A pesar de esto, me sentí alentado y aceptado. Empecé a trabajar para remodelar completamente el lugar y cambiar el menú", explica el empresario.
Así, con tan solo 27 años se convirtió en copropietario de un restaurante ubicado en una de las ciudades más reconocidas del mundo. "Dejé mi trabajo para dedicarme de lleno a este emprendimiento. Así, transformé la estética del lugar, le di un estilo ecléctico, contraté nuevos empleados y adquirí más responsabilidades", agrega el empresario.
Con el tiempo, recibió más clientes, muchos de los cuales eran celebridades. "El primero fue George Michael, que decidió celebrar su cumpleaños en 'Sur Restaurant & Lounge'. A partir de ese momento el lugar empezó a ganar una popularidad que trascendió barreras", dice con alegría Guillermo.
De este modo, la gastronomía era una profesión necesaria para perseguir su pasión. Ese mismo año compró parte del local que poseían sus socios y pasó a ser el único propietario del emblemático buffet.
"Me caí muchas veces, pero me levanté y logré superarme. Sin embargo, no habría logrado mi éxito sin la ayuda de mi esposa, Natalie. "Aportó al restaurante sabiduría y energía indispensables", añade alegremente la argentina.
Durante una noche de 2001, Guillermo conoció a Natalie, quien se convertiría en su futura esposa. Además de su belleza, se dio cuenta de que había algo muy interesante en ella que lo cautivaba, según sus palabras. "Me enamoré perdidamente y tres años después nos casamos", afirma el hombre.
Actualmente, "Sur" se ha convertido en un ícono de la gastronomía global, recibiendo constantemente a celebridades de todo el mundo. El negocio cuenta con 90 empleados y capacidad para aproximadamente 500 personas.
Además, el lugar se convirtió en el escenario del famoso reality show llamado "Las verdaderas amas de casa de Beverly Hills", donde Guillermo desempeñaba el papel de productor.
Esta producción le valió un reconocimiento abismal -en el sector gastronómico- y motivó al argentino a cumplir su sueño de llegar a lo más alto de Hollywood. Por ello, en 2014 volvió a actuar y producir sus propias películas.
Su primera producción fue "La Sombra del Gato", que contó con la participación del ilustre actor Danny Trejo. Eligió Argentina y filmó allí la producción de la película, algo que, según él, disfrutó mucho. "Pensé que era el comienzo de algo importante. Tiempo después, Amazon Prime Video y Apple TV compraron nuestra película, lo cual fue increíble", se enorgullece.
Al mismo tiempo, formó sociedad con Eduardo Pinto. Junto a él filmaron la película "Las Nubes", película policial que se presentará en el Festival de Cine de Bilbao, en España, en mayo de 2024.
"Gracias al mundo de la cocina y al capital que con ella recaudé, pude crecer en el mundo artístico y perseguir mis sueños. "Estoy agradecido con la vida y motivé a mis hijas a perseguir sus anhelos", dice Guillermo en su nuevo hogar.