El rey Carlos III superó a su madre, la difunta reina Isabel II, en términos de riqueza personal. Según la lista de ricos del Sunday Times 2024, la fortuna del monarca británico asciende a 770 millones de dólares, lo que le convierte en la 258ª persona más rica del Reino Unido.
La reina Isabel II tenía una riqueza personal estimada en 468 millones de dólares antes de su muerte en septiembre de 2022, según la lista del mismo periódico de ese año. Sin embargo, la fortuna de Carlos ha crecido sustancialmente desde entonces, aumentando en 12 millones de dólares sólo el año pasado, informó el Sunday Times. Un ex asesor del rey observó: "Después de esa pérdida de capital, se volvió prudente al conservar algo de dinero del ducado".
Carlos logró incrementar los beneficios anuales del Ducado de Cornualles en un 42,6% entre 2011 y 2022, recibiendo más de 268 millones de dólares durante ese periodo. El Ducado de Cornualles es una vasta propiedad valorada en aproximadamente mil millones de dólares, que incluye tierras, granjas, casas y otras propiedades. Este ducado genera ingresos que sustentan al Príncipe de Gales, su familia y sus actividades caritativas.
Después de la muerte de la reina Isabel II, Carlos heredó importantes propiedades. Entre sus posesiones más preciadas se encuentran Sandringham Estate en Norfolk y el Castillo Balmoral en Escocia. Las tierras de cultivo alrededor de Sandringham están valoradas en más de 360 millones de dólares. Además, Carlos posee otras propiedades, incluida Highgrove House en Gloucestershire y una residencia en Gales.
Aunque Carlos ha aumentado su fortuna personal, aún está lejos de alcanzar la riqueza de Hugh Grosvenor, duque de Westminster y padrino del príncipe Jorge. La familia de Grosvenor tiene un patrimonio neto de 12.800 millones de dólares, según el Sunday Times. Grosvenor también es el padrino del príncipe Archie, aunque el príncipe Harry y Meghan Markle no han revelado públicamente los nombres de los padrinos de su hijo.
La riqueza de la familia real británica es notoriamente difícil de calcular debido al valor desconocido de posesiones personales como joyas y regalos, así como a una de las colecciones de arte más extensas del mundo. Después de su muerte, la reina Isabel II también dejó a Carlos una cartera de inversiones valorada en aproximadamente 151 millones de dólares, informó el Sunday Times.
Para financiar funciones oficiales y el mantenimiento de residencias como el Palacio de Buckingham, el rey recibe una subvención anual del gobierno británico conocida como Sovereign Grant. Este subsidio proviene de los contribuyentes para cubrir los costos derivados de sus responsabilidades oficiales.
Un dato relevante es que, aunque se ha especulado sobre la aportación económica de Camilla, actual consorte del Rey, un exasesor explicó que esas suposiciones son incorrectas. “Ha habido sugerencias de que Camilla aportó una buena cantidad de dinero a su relación, pero esto no es correcto”, dijo el ex asistente al Sunday Times.
La gestión financiera de Carlos ha sido cautelosa, especialmente después de su costoso divorcio de la princesa Diana en 1996, que le dejó con una pérdida de 21 millones de dólares. Tras este suceso, se centró en ahorrar parte de los ingresos generados por el Ducado de Cornualles para recuperar su estabilidad financiera.
Business Standard publicó una lista que clasifica a los monarcas más ricos del mundo según su patrimonio neto en miles de millones de dólares. Para comparar la riqueza de Carlos, el rey británico ni siquiera aparece entre los 10 primeros. Esta es la lista:
Rey Maha Vajiralongkorn (Tailandia) – 43 mil millones de dólares Sultán Hassanal Bolkiah (Brunéi) – 28 mil millones de dólares Rey Salmán Abdulaziz bin Saud (Arabia Saudita) – 18 mil millones de dólares Emir Khalifa binZayed Al Nahyan (Abu Dhabi) – 18 mil millones de dólares Emir Sheikh Mohammed bin Rashid Al Maktoum (Dubai) ) ) ) – 14 mil millones de dólares Gran Duque Enrique (Luxemburgo) – 4 mil millones de dólares Príncipe Hans Adam II (Liechtenstein) – 4 mil millones de dólares Emir Sheikh Tamimbin Hamad Al Thani (Qatar) – 2 mil millones de dólares Rey Mohammed VI (Marruecos) – 2 mil millones dólares Príncipe Alberto II (Mónaco) – mil millones de dólares
